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miércoles, 26 de abril de 2023

LA GUERRA ME HIZO PUTA - MARY LUZ LÓPEZ HENAO

 


Sinopsis:

Es más fácil vender el cuerpo que un libro, la gente prefiere follar a leer. Escribí este libro con el objetivo de soltar esa pesada carga de mi pasado, de salir de la oscuridad de mi antigua realidad para encontrarme con el mundo de las palabras y llevar a cabo una misión: hacer memoria y dignificar a las mujeres en situación de prostitución.





Señores lectores:

Luego de AÑOS de ausencia por diversos motivos, en especial porque la vida de adulto está potente… hoy regreso con toda la disposición de retomar este blog y contarles sobre mis lecturas. Y no hay mejor manera de retomar que con el libro del que voy a hablar en esta reseña.

A este libro llegué por pura casualidad. En este momento, 26 de abril de 2023, se está llevando a cabo la Feria Internacional del Libro de Bogotá – FilBo, a la que anualmente acudo en búsqueda de libros que más adelante atesoraré. Evidentemente ya estuve el fin de semana y, haciendo recorrido de la feria (como lo suelo hacer siempre) me topé con el stand 246 del pabellón 3 y en él, me encontré a Mary Luz López, exponiendo su libro, La guerra me hizo puta.

Nada más el título a mí ya me llamó la atención de inmediato. Luego, ella me abordó explicándome que era la historia de su vida y todo lo que había pasado porque, a raíz de un encuentro desafortunado con un grupo armado, ella terminó tomando la decisión de ingresar al mundo de la prostitución.

El libro no es nada largo, de hecho, es muy fácil de leer. Se siente como que la autora nos está contando, en medio de sus anécdotas, lo difícil que es hacer parte del mundo de la prostitución. Y, al menos yo, nunca había sido consciente de lo increíble que es ese mundo, de las cosas que ellas tienen que vivir, que padecer. De las cosas que ellas conocen o que se ven obligadas a hacer porque para ellas, en teoría, no hay ninguna clase de respeto.

Nunca había pensado en lo complejo que es ese mundo porque, al final, las personas acuden a ellas a desahogar todas esas perversiones que en su “vida normal” no son capaces de admitir que tienen. Como decía alguien muy cercano a mi, ellas son la primera línea para evitar que las personas con sus parafilias terminen desahogándolas en mayor medida fuera de ese contexto.

Toda la vida nos han dicho que esas mujeres que deciden vender su cuerpo no valen nada. Que ni su vida ni su dignidad tienen valor alguno, que son pecadoras, que son mujeres de mala vida, que nada bueno tiene una persona que vende su cuerpo para sobrevivir y que ese ni siquiera debería ser un trabajo y hasta que se van a ir al infierno. Y, como esto es lo que nos enseñan a pensar, cada vez que salen noticias diciendo que encontraron el cuerpo de una mujer y que esa mujer ejercía la prostitución, el primer pensamiento que nos ataca es “se lo merecía por llevar esa vida”.

¿Por qué? ¿es que tomar la decisión de ejercer la prostitución les quita lo humanas? ¿les quita el status de personas? ¿por qué la vida de estas mujeres vale menos que las de los demás?  

Este tipo de reflexiones son las que me deja la lectura de este libro. Así como habrá algunas que entran porque quieren y porque consideran que es más rentable y mejor pago eso que otra actividad, hay muchas que llegan a ese mundo por necesidad o porque nunca conocieron nada más. Solo por poner un ejemplo, el libro cuenta la historia de una chica, conocida de la autora, a quien su madre, también en este mundo, la prostituyó apenas su cuerpo tuvo un desarrollo suficiente.

El libro es una cucharada de realidad y retrata perfecto lo difícil que resulta la existencia para las mujeres. Sobre todo para las que están en este mundo, porque los hombres creen que por esta razón tienen derecho sobre ellas y sobre sus cuerpos. Las venden y las toman como si fueran pedazos de carne. Abusan de ellas y se creen con ese derecho porque ellas tomaron la decisión de vender su cuerpo para pagar sus cuentas. Incluso, se creen con el derecho de tomar sus vidas si es que ellas no cumplen con los estándares que ellos mismos les imponen.

La realidad es que para las mujeres existir siempre ha sido muy difícil. Desde la antigüedad siempre hemos sido vistas como un objeto más. Sin embargo, la vida de estas mujeres, los peligros que corren y el riesgo que representa ejercer la prostitución en un país como Colombia hace que su existencia sea mucho peor. Las historias detrás de estas mujeres, que toman la decisión de ingresar a este mundo, nunca han sido fáciles. Y, como dice la autora, las personas que más duro las juzgan en el día, son las que más pagan por estar con ellas en las noches.

Como pueden notar, la voz de esta mujer y el hecho de que haya decidido contar su historia y, con la suya, la de un montón de mujeres, ha impactado mi vida como nunca lo imaginé. Y evidentemente recomiendo este libro a ojo cerrado. Ojalá todas las personas que lean esta reseña se motiven a visitar su stand y adquirir un ejemplar y lean el libro tan o más rápido que yo.

A la autora, si algún día lee esta reseña, le agradezco muchísimo por compartir su historia. Yo me imagino que no fue nada fácil y que escribir este libro reabrió heridas. Pero como le dije el día que compré su libro, hay que hablar para sanar. Y creo que este libro fue una oportunidad muy grande de reabrir heridas para cerrarlas para siempre.

A usted, señor lector, que llegó hasta aquí, le agradezco por su tiempo y le digo que esta vez es verdad que nos leemos pronto.

Un gran abrazo.

Ju.

 


1 comentario:

  1. Srta Ju, me atrapaste en tú relato de principio a fin...

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