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viernes, 26 de junio de 2015

El Gran Gatsby

Sinopsis:

Jay Gatsby, el caballero que reina sobre West Egg, el anfitrión de las noches sin tregua, pero también el triunfador marcado por el trágico sino de una soledad no pretendida, es el arquetipo de esos años veinte que se iniciaron con la Prohibición y discurrieron en el gangsterismo y la corrupción política organizada. Protagonista de una década que culminaría con la catástrofe de 1929, su imagen de esplendor no hace sino anunciar un drama inevitable. Triunfo de perpetua juventud, brillantez animada por el exceso, fueron también las constantes de la vida de Francis Scott Fitzgerald, quien nos ofrece en El gran Gatsby una de sus obras mayores.”

No conocía al autor del libro y no he leído ningún otro libro de él. Vi la película porque me dijeron que era muy buena y ni siquiera sabía que esa película estaba basada en un libro. Después me lo comentaron y tuve por mucho tiempo la intención de buscar el libro pero siempre se me presentaba alguna cosa o algún otro libro y me olvidaba de este.

Del autor no puedo hablarles mucho, pero por lo que leí en la edición que compré, era un personaje muy similar al protagonista de este libro. Buscaba fama y dinero, quería evitar sentirse como alguna vez se sintió: “el muchacho más pobre de una escuela de ricos” o, bueno, eso fue lo que leí.

En cuanto al libro, debo confesar que me encantó. Es una historia de amor muy linda pero no es un libro empalagoso ni tampoco un libro de mucho romance. Está narrado en primera persona, pero no por el protagonista, Jay Gatsby, sino por un tercero ajeno a él, pero que termina siendo el conector entre todos los personajes que van apareciendo.

También me gusta que, a pesar de ser una historia de amor, no hay un final feliz. Todo termina en tragedia, dando al lector una lección: no hay que trasladar los sucesos de una época a otra. Las cosas podrían ponerse difíciles y terminar en tragedia.

El señor Gatsby es un millonario extravagante que reside en West Egg y que cada sábado en la noche ofrece para quien esté interesado fiestas por todo lo alto: frutas y alimentos frescos, vinos y licores finos, todo de la más alta categoría. Todo el que quisiera podía llegar a su casa y el anfitrión nunca le iba a cerrar sus puertas. Siempre este señor fue un caballero, muy bien puesto en su sitio y muy cordial. Es más, la cordialidad era la que regía su vida. Nunca era descortés con las personas y trataba siempre de dar la mejor imagen de sí mismo. Sin embargo, hay momentos en que la verdadera personalidad de nuestro protagonista sale a relucir.

El libro es corto y sencillo de leer. Respecto de la película, está muy acorde a este y LeoDicaprio hace un papel extraordinario (es triste que el Oscar siempre se le escape de las manos). Se lee muy fácil y no tiene ni siquiera 200 páginas. Yo tan solo me gasté una semana (o menos) en leerlo. Solo me demoré un poco más haciendo la reseña por situaciones que se me salieron de las manos.

De cualquier forma, mi opinión sobre este libro es que por algo es un clásico y es muy recomendado para leerlo: refleja la realidad vivida en Estados Unidos en los años 20’, cuando el sueño americano era el sueño más grande de todos; cuando la posguerra hizo que se desarrollara todo el tema de publicidad norteamericana con el fin de atraer a la gente y mostrar una prosperidad que tal vez o tal vez no existió.

El libro, casi al final, tiene una cita que describe a la perfección la gente con la que nos hubiéramos encontrado de haber vivido en esa época:

“Tom y Daisy eran criaturas desconsideradas: hacían añicos cosas y personas y luego volvían a su dinero o a su enorme desconsideración, o lo que fuese, que les mantenía unidos, y dejaban que otros se encargaran de limpiar lo que ellos habían ensuciado…”

¿Que si lo recomiendo para leer? La respuesta a eso es un rotundo SI. Sobre todo porque el escritor en muy pocas páginas transmitió el significado real de lo que se conoce como “los felices años 20’s”. Y todos sabemos cómo esa “felicidad” relacionada con consumismo y capitalismo salvaje terminó: El crack de 1929.

Es un clásico y tal vez a muchos les aburra, tal vez solo quieran ver la película y creen que con eso es suficiente… Pero Fitzgerald quiso transmitir mucho más que una simple historia de amor trágica: quiso transmitir una realidad social viviente en esa época transformada en una tragedia romántica.


De este modo termina esta reseña, diciéndole a usted, señor lector, que si gusta, lo lea y si no, pues no lo haga. Cada quien con lo suyo. 

Agradezco a usted por tomarse el tiempo de leerme y nos leeremos en una próxima oportunidad.

viernes, 19 de junio de 2015

La noche en que Frankenstein leyó el Quijote



Sinopsis:

“¿Quién escribió las obras de Shakespeare? ¿Qué libro perseguía el KGB? ¿Qué novela ocultó Hitler? ¿Quién pensó en el orden alfabético para organizar los libros? ¿Qué autor burló al índice de libros prohibidos de la inquisición?  Estos y otros enigmas literarios encuentran respuesta en las páginas de La noche en que Frankenstein leyó el Quijote, un viaje en el tiempo por la historia de la literatura universal de la mano de Santiago Posteguillo, uno de los novelistas históricos más reconocidos por la crítica y el público de los últimos años, Y un profesor de literatura… poco convencional”

Santiago Posteguillo es un escrito español. No conozco mucho de él, este es el primer libro de este señor que me atrevo a leer. Según su página web es un filólogo, lingüista y doctor de la Universidad de Valencia. En este momento es profesor de literatura inglesa en la Universidad Jaume I de Castellón.

Siendo muy sincera, este libro lo adquirí en el año 2012 con unas expectativas muy, MUY altas. Desafortunadamente no leí completamente la sinopsis y, la verdad, es que me imaginé un libro completamente diferente al que me encontré. Fue por esa razón que me aburrí y lo dejé dentro de mi biblioteca por casi 3 años sin siquiera considerar tocarlo nuevamente. Realmente en ese momento me arrepentí de haber invertido "tan mal mi dinero"

Este ejemplar trae una serie de historias, de narraciones que hace el autor, acerca de “La historia secreta de los libros”. Es un texto lleno de las curiosidades que han tenido algunos libros y algunos escritores a lo largo de la historia y que, probablemente, mucha gente no sabe.

Una de las cosas que me motivó a comprar el libro fue su nombre, ¿la razón? Desde que conocí “el ingenioso hidalgo de Don Quijote de la Mancha” me declaré su fan absoluta. El título del libro cautiva a cualquier persona amante de los libros y, además de eso, la portada captura la atención de las personas, aun cuando no les guste leer mucho.

Pero ¿qué fue lo que pasó para darle una nueva oportunidad al libro que había arrumado ya por años?
En realidad fueron dos factores: El primero, precisamente fue el hecho de que ya hubiera pasado tanto, tanto tiempo. Estaba organizando mis libros y lo vi asomarse de repente frente a mí, así que decidí tomarlo y ponerlo en el montón de libros para leer (que en verdad no son tantos). Días después di con un canal de YouTube llamado Las palabras de Fa (Les recomiendo el canal) en el que “Fa” recomendaba arduamente la lectura de este libro y al cual describió de forma perfecta aduciendo que era un conjunto de CHISMES LITERARIOS.

Y así, con todo y la duda que me generaba empezar nuevamente con un libro que en realidad no me había gustado ni cinco, empecé a leerlo nuevamente. Y confesándome frente a usted, lector, es algo de lo que no me arrepentiré jamás. Me arrepiento de haberlo dejado arrumado por tanto tiempo. Es un libro muy interesante que, además de “chismosear” con su lector, llega a unas conclusiones que muchas veces lo dejan a uno sin aire.

En esta oportunidad me demoré menos de una semana en leerlo porque es un libro sencillo, es fluido y muy fácil de digerir. Está escrito justamente como un chisme, pero con bases sólidas y se ve que el autor se esforzó haciendo su investigación. El texto tiene 20 capítulos de dos, tres y, máximo, cuatro hojas por cada uno de ellos. Tengo muchas historias favoritas y las hay para todos los gustos.

El libro me gustó mucho, a fin de cuentas y declaro absolutamente revocada mi opinión anterior acerca de él. Lo recomiendo MUCHÍSIMO. Así sea solo por alardear con sus conocidos, contar historias de los autores favoritos de sus familiares o amigos o por, sencillamente, conocer un poco más de la historia que efectivamente se esconde detrás de algunos de los ejemplares más famosos de todos los tiempos.

Por último, quiero compartir con quien lea esta entrada, una cita de uno de los capítulos que más me gustó del libro, el cual se llama justamente como el libro: “La noche en que Frankenstein leyó el Quijote”. Es la conclusión del autor y expresa cosas que yo siento por el libro de Cervantes y pensamientos que comparto con Santiago; Y dice lo siguiente:

“Conclusión: si Mary Shelley aprendió español para poder no ya leer sino degustar el Quijote, ¿No deberíamos todos los que ya tenemos la fortuna de saber español encontrar algún momento de nuestra vida para zambullirnos, aunque solo sea un rato, en alguno de los maravillosos relatos que pueblan la irrepetible historia del maravilloso Don Quijote? Y pronto, antes de que los programas informáticos decidan que ya no debemos leerlo; o para ser más justo, antes de que quienes programan los programas informáticos decidan que ya no debemos leerlo”


Usted y yo, señor lector, nos leemos en una próxima entrada.

martes, 16 de junio de 2015

Las reputaciones


                  
Sinopsis:

“Javier Mallarino es una leyenda viva. Es el caricaturista político más influyente del país ‘un hombre capaz de causar una revocación de una ley, trastornar el fallo de un magistrado, tumbar a un alcalde o amenazar gravemente la estabilidad de un ministerio, y eso con las únicas armas del papel y la tinta china’. Los políticos le temen y el gobierno le hace homenajes. A sus sesenta y cinco años, después de cuatro décadas de brillante carrera, puede decir que tiene el país a sus pies. Pero todo eso cambiará cuando reciba la visita inesperada de una mujer. Tras remontarse con ella al recuerdo de una noche ya remota, Mallarino se verá obligado a revaluar toda su vida, a poner en entredicho su posición en este mundo.”

El autor del libro, Juan Gabriel Vásquez, es colombiano y puedo decir que, hasta el momento, es mi autor nacional favorito. Lo conocí por casualidad, cuando en medio de esas noticias de entretenimiento de la emisión de medio día cuando de repente deciden hacer recomendaciones literarias, escuché uno de sus libros: Los informantes (supongo que más adelante comentaré sobre este libro que realmente me encantó).

Para seguir con la misma línea de la entrada anterior, Juan Gabriel Vásquez también es abogado de profesión (es entendible mi admiración porque también estudio Derecho). Estudió, según entiendo, en la Universidad del Rosario y decidió salir del país apenas terminó su carrera. También era columnista del diario El Espectador, pero lo dejó hace ya casi un año, y ha tenido grandes reconocimientos a nivel nacional e internacional (ojalá algún día sea él quien lea esto :B)

Dejando de lado mi admiración por el autor, doy paso a la reseña que les hago del último libro que publicó en 2013.

El libro inicia con su protagonista, Javier Mallarino, sentado frente al Parque Santander, muy reconocido para los colombianos y, más aun, para los bogotanos. Es un parque ubicado en el centro de la ciudad que se caracteriza (o caracterizaba) por tener un espacio especial para las personas que quisieran embolarse los zapatos.

La historia se desarrolla de una manera diversa, dando saltos en el tiempo y haciendo una serie de combinaciones entre el pasado y el presente que puede llegar a ser confuso si uno no tiene claridad en los sucesos.

Tal y como lo señala la sinopsis, habla de un caricaturista muy reconocido que, hablando coloquialmente, no desaprovecha la papaya que le da la “farándula criolla” y la “crema innata” del país, que casualmente es quien decide condecorar a nuestro protagonista por su labor. Empezando el libro nos presentan a Mallarino yendo a su propio reconocimiento por su arduo trabajo como crítico social, pero este personaje es de esos ¿medio asociales? Que lo último que quieren es llamar la atención.

Entre saltos en el tiempo, se nos cuenta la historia de cómo empezó Mallarino a ser caricaturista, cómo quería ser pintor y una serie de acontecimientos de su vida que nos permite entender el desarrollo del personaje y sucesos que van surgiendo a medida que se va leyendo el libro.
Todo está bien hasta que aparece Samanta Leal. Es una joven, de más o menos 28 años, que llega de la nada a la casa de Javier, mintiendo descaradamente y aduciendo que la admiración que siente por él es infinita.

La aparición de Samanta, tan repentina, da inicio a la historia en la que se centra el libro. Sí, es cierto que nuestro protagonista es Mallarino, sin embargo no todo gira en torno a él. Como lo dice la sinopsis, la llegada de esta mujer hace que Mallarino decida reconsiderar su vida y su trabajo.

El libro muestra la influencia que pueden llegar a tener los medios masivos de comunicación en un país donde es muy fácil decirle a la gente que pensar. Y también muestra la facilidad que tiene una persona bien ubicada y con los contactos adecuados para salvar o destruir una vida, una reputación.

El libro, personalmente, me encantó. Es un libro pequeño, corto, tiene 137 páginas y en realidad se lee muy fácil y rápido. Además, Juan Gabriel siempre ha sabido cómo combinar el Derecho y la literatura y sus tintes de abogado se ven reflejados en sus libros; es una de las cosas que más disfruto… Sobre todo porque las entiendo y me gusta pensar que las pone ahí adrede para que quien entienda mínimamente de Derecho, pueda reír con él.

El libro es una crítica cruda y muy buena, reitero, a la influencia en las opiniones de las personas que leen, escuchan o ven las diferentes fuentes de información del país y del mundo. Y se hace necesario tomar todo con calma, fundamentar los prejuicios (si es que se tienen) y no juzgar porque sí, y tener cuidado con todo lo que se dice, lo que se piensa… porque, de cualquier forma, uno puede estar realmente destruyendo la vida de alguien sin saberlo, aun cuando ese “alguien” se lo merezca o no.

Lo recomiendo mucho, espero que quien me lea, lo lea y… no siendo más, nos leemos en una próxima ocasión.




martes, 9 de junio de 2015

El último jurado - John Grisham


Sinopsis:

"En una pequeña comunidad sureña, Danny Padgitt, principal sospechoso del brutal asesinato de una mujer, es condenado a cadena perpetua pese a ser miembro de una poderosa familia relacionada con asuntos turbios. Antes de ingresar en prisión, Danny jura vengarse del jurado. Cuando años más tarde es liberado por buena conducta, todos temen que cumpla su promesa."

El libro es escrito por John Grisham, quien es estadounidense y se ha caracterizado por sus novelas envueltas en dramas jurídicos con sus respectivas soluciones. Y es obvio, ya que este hombre ha sido abogado y Representante a la Cámara en su país.

Del autor solo he leído dos obras: la primera, Los litigantes, impuesta por un profesor en la Universidad (a quien le agradezco infinitamente por haberme mostrado esta clase de literatura) y la segunda, El último jurado, lo leí por gusto, porque me llamó la atención. Y es normal teniendo en cuenta de que acababa de salir del módulo de Derecho Penal y teniendo en cuenta que la sinopsis del libro habla de un asesinato, una condena, amenazas, corrupción, etc. Cualquier estudiante de Derecho con cierto amor extraño hacia el Penal se mostraría interesado por leer un libro así.

El libro empieza con la historia de una mujer que se casó siendo muy joven y al poco tiempo enviudó. Se dedicó a su familia y al jardín de su casa. Aunque de repente empezó a salir y a distraerse no solo en su pueblo sino en pueblos aledaños. El problema surge en el momento en que esta mujer es abusada sexualmente dentro de su casa y en frente de sus hijos. En medio de todo, la mujer alcanza a reconocer a su agresor y, como es lógico, él decide terminar su acto asesinándola. Ella muere en manos de sus vecinos no sin antes decirles el nombre de su victimario.

En ese momento se inicia el proceso en contra del único sospechoso del pueblo, miembro de una familia poderosa, adinerada y corrupta, capaz de manipular a cualquiera con tal de lograr sus cometidos.

Hasta ahí pensé que todo se iba a desenvolver en torno al proceso, a los abogados, a los fiscales, etc. Pero resulta que no. Resulta que la historia es narrada por un periodista recién graduado, que acaba de comprar el periódico del pueblo y que busca, de todas las formas posibles, dar un punto de vista objetivo de los sucesos.

Luego todo empieza a girar en torno de los conflictos de los años 70 (época en la que se desarrolla la historia): problemas de racismo, contrabando, corrupción.

Muestra como en ese entonces el racismo era pan de cada día. De cómo los “blancos” discriminaban a los “de color”, de cómo había escuela para “blancos” y escuela para “negros” y cómo la gente se negaba, en principio, a permitir que sus hijos estudiaran con “esos”. El autor plasma el problema de inclusión que había en esa época y de lo difícil que era ser un “Negro” en Estados Unidos, sobre todo en el sur del país.

Además, deja también al descubierto el problema del contrabando de alcohol en esa época. De este modo, pone a los villanos de la historia como gente inescrupulosa, acostumbrada a hacer sencillamente lo que le viene en gana. Desde traficar de una forma u otra con licor y drogas, hasta manipular la justicia del condado bajo amenazas o bajo jugosos sobornos.

En mi opinión, el libro es bueno. No es el mejor libro de todo el mundo. Me tomé el tiempo necesario para leerlo con tranquilidad. Fue menos de un mes. Es entretenido e interesante. Contextualiza muy bien al lector y no deja por fuera la parte jurídica, que fue la que me llamó la atención. Lo recomendaría si el lector está dispuesto a escuchar diálogos medio aburridos en ciertos momentos. Pero así como se pone flojo en algunos momentos, tiene unos picos increíbles que dejan al lector sin aliento.


Creo que eso es todo por ahora. Espero guste a quien interese. Gracias de antemano y luego nos leemos.